viernes, 27 de julio de 2018

El mismo

Saberte mentira,
saber que eras carencia. 
Fantasma.
Lugares comunes
Ese culto al ser, 
al mismo, 
el que revela lo absurdo de la obsesión.

Lo imperdonable, 
lo que no podrá pasar.
Lo inolvidable, 
lo incomodo de la vulnerabilidad. 

Que cosas...
Que cosas nos muestran los fantasmas
cuando deciden volverse realidad. 

lunes, 12 de junio de 2017

No me basta

Te acuestas prístina a mi lado
(linda palabra rimbombante)
y el mundo se me queda corto.

Corto en tu dolor, 
corto en la extraña sensación de distancia,
de sentirte ajena (tuya)
de sentirte lejos estando junto a la piel.

Porque el fuego (vos)
no es razón de algarabía.
Es necesidad, es calor, 
es sensación de abrigo 
(en medio del frío de vivir)
no es permanencia.

Y yo, ingenuo, soñador, 
poeta y pobre diablo
(más lo último)
siento que al vivirte te alivio
que eso bastará...

Pobre tonto incapaz.

sábado, 7 de mayo de 2016

DE ERRORES

Es de noche. Estás cansada pero sigues sin poder dormir

Él, tranquilo, duerme a tu lado. Tratas de pensar que la cama en la que estás es lo suficientemente grande para dos, pero aunque la cama fuera de diez metros sentirías la sensación de ese cuerpo extraño a tu lado, respirando...

Hay algo de este experimento que no termina de gustarte, será una larga noche.

Te mueves un poco acomodándote entre las sabanas que vas a compartir, él despierta, te mira un poco confundido y vuelve a dormir. Lo miras ¿cómo es posible que pueda dormir con la boca abierta sin babiar? Te ríes, tratas de sacar el pensamiento de tu cabeza, finalmente apagas la luz, te remueves un poco buscando esa postura perfecta para dormir.

Tu movimiento lo despierta. En la semioscuridad te mira ¿cómo es posible que puedas dormir con la cara contra la almohada sin ahogarte? Tal vez debió dejar que tomaras un taxi, ¿qué estaba pensando en el momento en qué te pidió que te quedaras? cuando insistió. Quizás no fuera una buena idea...

Se mueve y te siente despertar, en verdad tienes un sueño liviano. Volteas el rostro y lo descubres mirandote, él ve tu cara adormilada, tu pelo desordenado sobre la almohada, tu figura bajo las sabanas...

Se acerca, baja su mano por la curva de tu espalda hasta tus nalgas las que acaricia con una suavidad que es casi termura. Sin pensarlo mucho subes una mano por su pecho hasta acariciar su rostro. Ambos suspiran. Tal vez no todo resulte tan mal después de todo...

lunes, 14 de diciembre de 2015

Era usted

Yo necesitaba que usted me destrozara la vida.
Por eso me paré en el filo del abismo, dispuesta a caer, por eso me puse mi armadura de mujer fuerte 
Desenredé mis miedos para construir con ellos las mantas con las que usted nunca quiso cobijarse, las que nunca vio, las que ni siquiera yo vi.
Y  a mí, que la soledad siempre me ha resultado tan cómoda, me aplastó lo denso de la soledad en su compañía.
¿Por qué resulta tan difícil enamorarse? 

lunes, 23 de enero de 2012

Misivas.

Incapaz de ceder mi orgullo bajo el surco infranqueable que se ha cruzado en mi vida, me veo en la penosa necesidad de soterrar la realidad de las palabras y omitir que aquello que se podría conocer como mendigar facilita mi pedido bajo el nombre de algo menos insultante para mi ego herido: ¡Te requiero!
A ti, íntegro, cabal, exacto, completo… complejo
Y no es una necesidad-llamémosle mejor pretensión-producto de un simple capricho nostálgico. No, esta misiva está construida bajo la premisa irrefutable que si no fuera un requerimiento superior a cualquier tipo de barrera construida en mí, algo casi fisiológico, no estarían tus ojos posándose sobre estas letras urgentes.
Yo que no necesito de ti ahora sostengo que ya no me basta un recuerdo, que ya no me basta el orgullo, que ya no me basta nada que no sea tu ser.
Cuando hablo de requerir, hablo de pedir, de reclamar, de exigir (¿por qué no?) que pongas un alto en tu existir y desvíes tu mirar y tu caminar hacia mí. Mi protesta va cargada con todo el egoísmo irracional del que te puedas hacer idea; poco me importan los miles de kilómetros que separan tu camino del mío, una carencia inmediata me insta a buscar la solución más pronta (la única) y de forma apremiante te solicito aquí. ¡Ya!  Raudo, veloz.
Que poco me interesa cuantos obstáculos hay en medio, cuan largo sea el sendero que hayas de recorrer, cuantas llagas pueda acarrearte retornar a mí. Yo me desangro de forma constante y el único paliativo para está agonía permanente es tenerte aquí; así que con urgencia te llamo, te exhorto con premura a que hagas presencia. No en cuanto los recovecos de tu existir te lo permitan, no cuando haya un pequeño aparte en tu vida que quieras destinar para mí, es absolutamente necesario que acudas a mi andar ipso facto.
Habiendo recorrido tus pupilas estas letras, en un último dejo de racionalidad me veo en la penosa obligación de confesarme atribulada, arrepentida, lo suficientemente herida. Por lo cual como ultima exigencia me es necesario anotar que en la medida de lo posible, y siendo absolutamente necesario, olvides de manera inmediata lo leído y no prestes atención de lo aquí plasmado.
Sigue tu camino, no le hagas caso a mi nostalgia envenenada de licor.    

Perplejidad

"Qué cosa extraña, Lejana:
nunca te recuerdo desnuda,
siempre llevas algo puesto:
un abrigo rojo,
una falda larga
y, en pleno verano,
una blusa cerrada.
  
No, nunca amanecen en mi memoria
tus senos descubiertos,
ni tus muslos,
ni el fino triángulo
que cubría tu sexo.
  
Tu desnudez permanece
como una flor en la sombra,
como si alguien me castigara
devolviéndote
no solo a tu misterio
sino también a tu virginidad.
  
Y pensar que, entonces,
ardíamos juntos
como un par de leños.

Qué riguroso, Lejana, el modo
en que volvieron a vestirte
las manos del tiempo."

Eduardo Mitre

Que curiosos son los recuerdos ya olvidados que se atraviesan de repente y sin razón aparente en la memoria  (Reviviendote)

sábado, 7 de enero de 2012

Tuya

Ella habla de errores, de olvido; Ella te entrega razones, te da porqués; Ella se cobija en mentiras y orgullo. Pero son sus manos las que se aferran a ti cuando te alejas, cuando le obedeces, a Ella a quien más. Cuando tu boca pronuncia el adiós que sus palabras incitan son sus ojos, los de Ella, los que te ruegan angustiados que te quedes.

Ella te habla como si fuese otra la que sintiese, como si fuese ajena a si, como si fuera otra la que viviese, otra la que llorase, otra la que callase, la que ocultase, otra el alma que sufriese. Como si hablara de otra Ella que no fuese ella misma.

Ella se refiere a un ustedes que, entre Ella y vos, es un nosotros. Ella le escribe a un alguien que dice que no sos vos, cuando los dedos de Ella solo hablan de vos. Ella y su boca, Ella y su mente saben muy bien mentirte dentro de un cuerpo ajeno que no reconoce mentiras. Porque del mismo rostro que dice ‘olvídame’ brotan las lágrimas que gritan ‘Por favor, no lo hagas’.

Las lágrimas de ella son tuyas, aunque Ella no las reconozca como propias y no te acepte como origen y causa de ellas, tuyas.  Las palabras que te dice son de Ella, lo único suyo, lo único propio ajeno a ti; mentiras puede decirse, pero mentiras su propiedad.

Ella habla, Ella jura, Ella asegura, Ella nunca responde, no te corresponde. Pero pregúntale por lo que quiere, por lo que desea, por lo que añora y espera su silencio…Ella nunca te va a decir que Ella dejó de ser Ella cuando comenzó a ser tuya.  

domingo, 30 de octubre de 2011

Recetas de olvido.

Remedio para el olvido: “La zanahoria debe ser mediana –dice Aldo-. Debes mojarla en agua lluvia y luego untarle limón. La dejas cinco minutos a fuego lento y enseguida la pones a congelar”
¿Funciona?
No lo sé
¿Lo vas a intentar?
……
No, todavía no. Aún hay algo que me falta y no me voy hasta no conseguirlo. Después zanahorias, burundanga, hechizos o lavados de cerebro; pero por el momento no, no me ha dado la gana. 

martes, 27 de septiembre de 2011

Mi amor por ti.


¿Cómo decirte que hace ya mucho tiempo que no logro sentir?
La duda carcome cada espacio de mi alma mientras la tuya se desvive por brindarme todo cuanto tienes por dar.
¿Por qué procuras darme tanto amor? La fascinación de tus ojos al mirarme causa en mí una impresión extremadamente fuerte.
Cada gesto de amor hace crecer en mi un odio y un hastío que apenas logro controlar; y desearía que fueras el ser más vil sobre la faz de la tierra tan solo para justificar el rencor que creo siento por ti.
Y es que tu papel de hombre bueno solo logra recordarme la maldad de mi ser. ¡Que alma tan vil la mía que solo logra odiar a aquel que le procura adoración!
Careces de todo merito por el simple error de quererme
-“Sabes que te adoro por sobre todas las cosas” -Me dices, y mis ojos se derraman en un llanto incontrolable.
Sonríes y atraes mi cuerpo junto al tuyo interpretando para mis lágrimas como si fuesen de alegría; las mismas que sobre tu pecho se vuelven un rio.
¿Cómo podría decirte que no es la alegría lo que produce mi llanto? Que es el dolor, el asco, de saberme tan profundamente querida. Y yo hielo, yo muerte, yo vacío por dentro; yo desprecio, yo odio, yo todo menos amor.
Tu cariño araña mi carne y lacera las llagas que hay en mi interior. Yo soy bálsamo en tu vida, vos sos veneno repugnante en mis labios.
No te quiero, no…definitivamente no te quiero. Definitivamente me odio por odiarte, odiarte por el simple hecho de amarme tanto.
Solo no me preguntes lo que siento…

miércoles, 14 de septiembre de 2011

Exploración

Me voy a cobijar en tu cabello.
Mutarme en ti, conocerte es lo que quiero.
Descender hasta tus pequeñas orejas;
jugarte, para después aventurarme hasta tus cejas.
Danzar por la curvatura de tus pestañas,
para después deslizarme en tus mejillas,
con la vil osadía de las lágrimas.
Llegar a la punta de tu nariz
y admirar el paisaje que desde allí se extiende;
como lo vieses tú, quiero entender como tú entiendes.
Y desde allí un salto hasta tus labios,
reposar allí en la suavidad y calor de ellos;
sentirlos mejor, vivirlos mejor,
acariciarlos con mi cuerpo como si fuese con besos.
Quedarme es decir, a vivir en tu rostro,
Deleitarme, en cuerpo y alma, en lo que llevo grabado en los ojos.

lunes, 5 de septiembre de 2011

Contradicción

Arriba…
Y presiento que te amo,
Que lo seguiré haciendo hasta que resuene el eco del final de los días.
Abajo…
Y presiento que te olvido,
Que las añoranzas de ti se marchan danzando sin una despedida.
Arriba… 
Y recuerdo que te extraño,
Que mi piel se revuelve entre las sabanas exigiendo a gritos tus caricias.
Abajo….
Y recuerdo que te he llorado,
Que loca de odio he gritado en silencio y entre lágrimas mis desdichas.
Arriba…
Y prometo que he de recuperarte,
Que no valdrán mil obstáculos que me impidan atraer de nuevo mi alegría
Abajo…
Y prometo que habré de alejarme,
Que ni un paso hacia ti darán mis pies, que nada tiene por brindarme tu compañía
Arriba…
Y descubro que me falta voluntad,
Que tan solo el roce de tus labios me pierde en un éxtasis de desenfreno.
Abajo…
Y descubro que me falta valentía,
Que tu sola presencia me estremece de un miedo incontrolable y extremo.
Arriba…
Y decido no olvidarte,
Que tu recuerdo seguirá existiendo y que hasta que pueda te seguiré queriendo.
Abajo…
Y decido atrás dejarte,
Que de nostalgia y melancolía, que con tristezas y desdichas no se puede seguir viviendo.
Arriba y abajo…
Y aquí se acaba el juego,
Que yo lo que quiero es estar o del todo bien o del todo jodida. Pero así ya no hay cuerpo que resista...

Rutina

Hoy tengo tu olor impregnado, no sé si en mi piel, no sé si en mi ropa, no sé si en mis delirios…Pero hoy realmente lo siento y esto ha alterado completamente la rutina de mi existir. 
La presencia de tu aroma se me hace anormal dentro de la costumbre de imaginarle cada día; y hoy por alguna incomprensible razón le tengo aquí para recordarme con mayor fuerza la realidad absoluta: que tú no estás y que sentirte rompe mi rutina de tener que imaginarte diariamente. 

martes, 30 de agosto de 2011

Solo ahora.


Entrégate al hoy, no temas del mañana,
Vive el ahora no te aferres al pasado.
Que si al acercarte no te estremeces
Años de historia no pesan nada.
Costumbres amor, solo costumbres,
Que horadan el alma y enfrían la piel.
Y el fuego que arde en cada amanecer
Mañana será solo ceniza;
Polvo corazón que ensucia lo bello
Que cubre de abandono y envejece lo querido.
¿Qué puedo darte más allá de mi presente?
Más allá de la magia que se desprende,
No quiero nada más, no deseo algo diferente,
Adoración viva, cariño sentido íntegramente.
Víveme ahora amor, que mañana no se sabe,
Y si quieres una seguridad solo una puedo darte:
A pesar de mí, por este único instante
(En que tus ojos se clavan en mis pupilas anhelantes)
Te quiero mucho más que nada o nadie.

martes, 23 de agosto de 2011

De mentiras varias

¿Cómo hacer para ser tú y no llorar por mí?
¿Cómo hacer para ser yo y aprender a llorarte al fin?
¿Cómo hacer querido? ¿Cómo pensar, como sentir?
De  nuevo…
Tiene uno que ser muy vos para enamorarte así,
Tiene uno que ser muy yo para no enamorarse de ti.
(O mejor dicho, para poderlo tan bien fingir)

martes, 9 de agosto de 2011

Coral


La coraza en tu interior ha conocido el miedo.
No el miedo de la indiferencia mujer serpiente,
Eres inmune al veneno de desprecio que corre en tus venas.
No sientes pánico de la soledad, tu fiel amiga, pérfida.
El azabache de tus ojos no se amilana ante el enemigo más mortal,
Te regocijas en el dolor frío antesala de la muerte, la ajena, cruenta victimaria.
¡Ah, pero como tiemblas ahora diosa licántropa!
Despliegas tus armas en inútil agonía, en torpe lucha, acorralada.
Tu orgullo rancio te impide partir en franca huida, y te quedas en vana guerra.
No te quedes en posición de lid mujer, que no hay batalla por luchar,
Repliega tus armas que tus murallas están cuarteadas.
Mueres ahora de miedo ante aquel que mansamente pretende tus encantos,
Porque no conoces terror mayor que un ardoroso amor correspondido.

Y hablando de pesares...


Mil demonios se posan en la boca de mi estomago, destilan odio. Cargados de pestilencia encuentran asidero allí donde no alcanza la luz, donde todo lo bueno se convierte en un vaho pútrido que va carcomiéndome las entrañas.
No, no lo pueden ver. Cobarde como es, el infeliz se camufla bajo sonrisas simuladas. Porque millares de pesares se conjuran en un solo ser que repta sin traba por un cuerpo inerme que ha despreciado su redención.
Prisión de carne, vil instrumento, tan solo una masa que sirve como alimento de plagas. Y todo en apariencia tan perfecto, tanta paz en un rostro anémico es sinónimo irrefutable de agonía, y aun así no lo ven…no lo pueden ver.
Arcadas agónicas irrumpen el silencio de la noche, exorcismo incompleto, expulsión falsa. Un alivio que no es tal; como el drogadicto, como el abstinente, un placebo fisiológico en busca de un bálsamo que pasa desgarrando mi garganta con estruendos de dolor.
Consuelo artificial. Sonidos guturales que erizan la piel de nadie, sin testigos, sin que haya un espíritu altruista que se atreva a inmiscuirse, causa perdida lo saben, guerra perdida se entiende…maldición perpetua.
Las pupilas se anegan en lágrimas de frustración mientras el cuerpo en un último esfuerzo va buscando el final del tortuoso ritual. En busca del vacío, se desata un torrente maligno que fluye arrastrando consigo el néctar mismo de la vida…la vida se me va yendo a coutas por el drenaje.  
Y todo se va, todo se pierde y se diluye en agua. Todo, menos el mal nauseabundo que con garras y ganchos está anclado en mí ser. No hay vomito alguno que pueda expulsarle de allí…
Una oda a vos maldición miserable que vas consumiendo mi salud.

lunes, 8 de agosto de 2011

Plegaria



Silencia mis labios señor, calma el ímpetu de mis dedos, de mis ojos. No me dejes caer, no me permitas recaer. Conserva el mutismo en mi existir, que las razones las conoces todas.


Que mi verdad la conoce el cielo, la conoce la luna, el techo de mi cuarto, la soledad de mis sabanas, la madrugada, mis demonios. La sabe todos menos a quien corresponde saberla ¡Acalla mis sonrisas a sus ojos!

Destroza el ruido que corre en mi ser. Quítame las ganas de gritarle al viento su nombre, de llorar a sus pies, de proferir a viva voz todo esto que me carcome tan adentro.

No dejes desbordar el rio de sentir que llevo estancado conmigo, hazlo por mí, hazlo por él. Que prefiero morir ahogada antes que dejar que mi maldición anegue su vida.

Tú sabes con cuanto amor he callado, no dejes que ahora mi debilidad destruya esas compuertas que construí para él, por culpa de él, para resguardarme de él.

¡Ayúdame por favor que siento que ya no puedo sola! Que una sola mirada suya, una sola sonrisa, podría destrozar todo cuanto hay en mí. Protégeme de él, protégelo de mí y de lo que siento. Que tanto silencio no va en vano y me moriría antes de dañarle.

viernes, 22 de julio de 2011

Terapia de besos

Un delirio irreal con nombre propio,
Que tiene como única cura unos besos ajenos.
¡Cuánto no daría por tener esa medicina secreta en mi ser!
Pero solo tus labios, único y mortales,
Me entregan el elixir que calma la sed que sufro.

Eres opio de lujuria, toxina que invade y sana;
Veneno que bebo a conciencia, lucida,
Para calmar mi propia locura e insensatez.
Con seguridad suicida me bebo la droga en tu saliva.

Drogadicta de ti, la abstinencia carcome mis labios,
Mis dientes ansiosos laceran con angustia mi propia boca,
A falta de la tuya, a falta de ti.
El síndrome que sufro tiene tu imperfección marcada por doquier.

No conozco, no encuentro, no me interesa,
No quiero otra manera de sanar mi locura.
Si no es con besos, si no es con TUS besos,
Prefiero seguir enferma de nostalgia
¿Qué interés puede tener mi cariño narcótico en otro tipo de calmante?

Galeno  de mis desvelos, necesito tu terapia,
Así que…¡Cúrame o mátame!
Que lo mío es cuestión de algo más que una simple manía.

martes, 19 de julio de 2011

De batallas perdidas.

-¿Quién le autorizó la entrada?
-Vamos a darle una oportunidad
-¿Una oportunidad? ¿De qué? ¿A razón de que? ¿Quién es este tipo?
-Dicen desde los recuerdos que es alguien importante.
-¿Importante? Eso no dice nada, importante es cualquiera
-¡No es un cualquiera!
-Se porta como tal…
-Es tal. Pero, lastimosamente, no lo es aquí
-¡Alguien tiene que responder por esto! ¿Qué pasó con las defensas?
-Se derrumbaron
-¿Las derrumbó todas?
-No. Cedieron; las eliminamos
-¿Estamos sin defensa alguna?
-Prácticamente
-¿Quién las mando a destruir?
-(Silencio)
-¿Qué barreras nos quedan?
-Pocas…A estas alturas un poco de sensatez, la desconfianza está en pie pero débil y miedo, hay mucho…
-¿Solo eso nos queda? ¿Qué pasó con la voluntad, con la prevención? ¿Qué pasó con la frialdad?
-La voluntad es suya pero el frente de sensatez se empeña en mantener eso como secreto de estado. La prevención se cayó por su propio peso y donde había frialdad hay una invasión de afecto y ternura.
-¿En qué momento pasó todo esto? ¿Acaso lo conoces?
-Muy bien. Es caprichoso, indeciso, simple, voluble, no sabe lo que quiere…
-Eso significa que tampoco sabemos si le quiere.
-No…
-¿Y alguien le quiere a él?
-Dice el corazón que él le quiere mucho.
-¿El corazón? ¿Acaso aprendió a hablar?
-No, aun no logramos descifrar su lenguaje pero parece que aprendió a decir eso en el nuestro y lo repite como un loco todo el día.
-¡Convoquen una junta! Esto es grave. ¿Alguien sabe que opina el cuerpo?
-Nos llegan informes que dicen que el cuerpo ya no puede soportar las emociones que está experimentando.
-¿Quién dejó libres las emociones?
-Escaparon en cuanto se derrumbó la voluntad
-¿Es muy fuerte el ataque?
-Mucho. Dice el cuerpo que la piel se eriza en cuanto le toca, que el olfato se ha vuelto terriblemente sensible a su olor, que las manos le buscan, que las piernas por una extraña razón terminan siempre entre las suyas, que los ojos no pierden minuto para deleitarse con sus labios y su mirar, que una sonrisa incontrolable se apodera de la boca en cuanto le oye o le ve.
-¿Se ha dado cuenta acaso de todo eso?
-El cuerpo ha luchado todo lo posible por fingir pero hay cosas que se le escapan. Es demasiado obvio…
-¿No ha usado la indiferencia?
-Toda. No ha funcionado, ya no queda más, se nos ha agotado.
-¿Qué pide el cuerpo entonces? ¿Mandamos refuerzos?
-…Dice que no quiere aguantar más...
-¿Piensa rendirse?
-Ya se ha rendido. Pide autorización para dejarse llevar.
-Denegada. Ha sido de nuestros mejores guerreros ¿Qué le ha pasado?
-Le desea con fuerza. Pide excusas al mando central por su error pero dice que le fue inevitable.
-¡Esto es un desastre! ¿Qué ha hecho el sujeto este para causar un caos así?
-Pues básicamente no mucho…
-¿Entonces? ¿Por qué nada ha funcionado en su contra? ¿Qué puede tener de especial?
-De los recuerdos han mandado un informe detallado sobre ese punto pero no es muy claro. Pensé que se habían equivocado de documento pero me han rectificado que efectivamente eso es lo que contiene la base de datos; solo hay un gran número de defectos y muchas tonterías.
-¿Qué ha hecho entonces de diferente?
-Técnicamente nada. Ha usado lo mismo que todos pero al parecer algo ha hecho que cada cosa que hace se sienta diferente.
-Comunícame de inmediato con el alma. Esto requiere medidas extremas
-Ya está enterada y se ha comunicado con nosotros.
-¿Ya? ¿Y que ha dicho?
-Le quiere…con toda el alma
-(Silencio)…Desplieguen las tropas, traten de subsanar los daños causados, pongan en vigilancia al corazón y usen los escudos para proteger lo poco que queda. Perdimos en nuestra ley…
-A lo mejor no es tan malo perder en esta ocasión.
-(Suspiro) Yo solo sé…que esto va a doler mucho…

jueves, 7 de julio de 2011

Ajena

¿Cómo le digo señor que, sin quererlo, le quiero por encima de todo?


Que tengo las manos sangrantes de espera,
Los labios flagelados por besos ajenos,
Que el frío de mi cuerpo me quema. 


Que cada que me cubro con caricias extrañas
Solo logro que mi cabeza se remuerda al saberme suya.
Tan completamente suya, tan absurdamente de él,
Tan inevitablemente poseída por su no-presencia.


¿Cómo decirle señor que profano su recuerdo buscándolo en otros?
Y que solo logro hallar un remordimiento aplastante.
Que me ahogo en besos, caricias y sonrisas,
que añoro suyas pero que no le pertenecen.


¡Que me lleve por dios! Que me reclame suya,
O que me entregue completamente mía. 
Ya no soporto saberme ajena en mi propio cuerpo...

jueves, 30 de junio de 2011

Mi presidio

"Te vi partir, y el amor en mi silencio se hizo llanto,
vi juguetear sobre tu espalda haciendo olas tus cabellos,
fija mirada en la distancia yo iba siguiendo tus pasos,
vi diluir en tus pupilas empañadas mi embeleso.

Pensé vivir donde jamás lograra palpar tu presencia
he visto el cielo del olvido y me di cuenta
que estoy perdido en el camino de mis sueños.

Mujer tu eres mi presidio mi corazón es cobarde,
en ti quiero refugiarme, aunque existen mil motivos
que ha sido imposible darme amor tesoro escondido

Como felino en asechanza yo iba siguiendo tus pasos,
me siento esclavo de la noble y sublime intención de tenerte,
y no te enojes si por sincero un día te pido lo deseado,
quiero que sepas solo al mirarte la ansiedad al mirarte loco me vuelve.

Y tu haz notado que no es antojo simplemente el que me asiste
es un amor que he combatido pero insiste
y me seduce para que te siga amando.

Tu escrutadora mirada, tu voz callada me avisa
que me quieres con el alma, lo confirma tu sonrisa
y que tal vez sea mañana que acudirás a mi cita."

¡Ay que bonito me suena ese canto vallenato lleno de sentimiento!

viernes, 3 de junio de 2011

Sacrilegio

Profanación es hacer publico aquello que por su valía debía siempre permanecer escondido del mundo común.
Profanación es entregar tu verdad para no perderle entre los recovecos del recuerdo y del pasado.
Profanación es aferrarse a la única manera de hacer realidad aquello que tomó forma entre la oscuridad y la fantasía.
Profanación es sonsacar, violar, manchar, deshonrar, degradar, insultar, matar, olvidar....


Todo un sacrilegio lo que hice con esta historia...
Lo que hice conmigo, lo que hice contigo, lo que hice con ese "nosotros"...
"Suena como un crimen lo que tu me has hecho"

jueves, 2 de junio de 2011

Divina tentación.

"Así me nombraste en nuestra última conversación, conversación en la que una vez más dejaste afuera la verdad, todo se pudo evitar de habernos retirado a tiempo, ambos culpables, lo sabes, no me dejabas ir y yo quería quedarme... pero a pesar de todo, de tus ofensas y las mías, del sin fin de mentiras que me regalaste, de las amenazas, las lágrimas y las ganas de no volver a verte, tengo tanto miedo, tanto, de que el día menos pensado tú pierdas la vergüenza y yo el orgullo y volvamos a caer enredados en ella... Divina tentación.

No podemos alejarnos así queramos -también dijiste-
Quisiera no creerte..."

domingo, 29 de mayo de 2011

Desesperación.


Este antojo urgente y voraz que llena mi ser esta noche

Quiero arrancarte la piel a mordiscos!
Hambre de ti,
Necesidad voraz.
Me quiero beber tus labios,
Besar tu dolor,
Saborear tus heridas
(y si no las hay,
Herirte yo)
Comerte,
Degustarme en ti.
Lamer TU cicatriz,
esa diferente
en tu existencia de cualquiera.
Sed de ti,
Ansia de tus fluidos.
Todo, entero,
Te deseo.
No, ¡Te necesito!
Pasión por ti,
Apetito desmedido.
Anhelo voraz,
Deseo insaciable,
Abstinencia absurda.
Ganas…
Cuantas ganas.
Desenfreno, calor,
Ardor violento,
¡Quema, como quema!
Al deseo atada,
De mi lujuria esclava.
Ayuno inútil,
Carencia total,
Que me faltas ¡Carajo!
Paciencia, resignación,
Desesperación…
Definitivamente
Hoy me conformo solo con lamer tu cicatriz.

viernes, 13 de mayo de 2011

Para no olvidar...

Escribo para no olvidar.
Todo con la esperanza fútil de perpetuar todo aquello que acudo a plasmar en letras ávidas de vencer a este tsunami de olvido que va cruzando por mi existencia.
Porque el olvido me llega (tarde como siempre, como todo en mi vida) pero cargado de un ímpetu feroz que va barriendo con todo aquello que se encuentra a su paso. Y si de repente voy olvidando lo que fui me produce terror la idea de olvidar lo que soy (aunque no logro recordar cómo es que llegue a ser); y peor aún, a olvidar lo que tuve muy a pesar de la extraña sensación que me ronda de nunca haber tenido.
En este mar de olvido todo se confunde y se va yendo en medio de un silencio que se hace cómplice. Lo que no se asegura no permanece y por ello me aferro con las fuerzas que me quedan a tus recuerdos; por lo menos mientras no deje de recordar que por este instante y por los siguientes no estoy dispuesta a desistir de ti. Aunque a estas alturas ya haya olvidado completamente las razones que me instan a seguir empeñada- como si me fuera la vida en ello-en no dejar marchar el leve vestigio tuyo que me queda. Aunque todo este maremoto de olvido haya sido creado únicamente por la imperiosa necesidad de borrarte a ti, tan arraigado de mi ser.
No importa, no interesa, eso último sé muy bien que pronto también lo olvidaré…