domingo, 30 de octubre de 2011

Recetas de olvido.

Remedio para el olvido: “La zanahoria debe ser mediana –dice Aldo-. Debes mojarla en agua lluvia y luego untarle limón. La dejas cinco minutos a fuego lento y enseguida la pones a congelar”
¿Funciona?
No lo sé
¿Lo vas a intentar?
……
No, todavía no. Aún hay algo que me falta y no me voy hasta no conseguirlo. Después zanahorias, burundanga, hechizos o lavados de cerebro; pero por el momento no, no me ha dado la gana. 

martes, 27 de septiembre de 2011

Mi amor por ti.


¿Cómo decirte que hace ya mucho tiempo que no logro sentir?
La duda carcome cada espacio de mi alma mientras la tuya se desvive por brindarme todo cuanto tienes por dar.
¿Por qué procuras darme tanto amor? La fascinación de tus ojos al mirarme causa en mí una impresión extremadamente fuerte.
Cada gesto de amor hace crecer en mi un odio y un hastío que apenas logro controlar; y desearía que fueras el ser más vil sobre la faz de la tierra tan solo para justificar el rencor que creo siento por ti.
Y es que tu papel de hombre bueno solo logra recordarme la maldad de mi ser. ¡Que alma tan vil la mía que solo logra odiar a aquel que le procura adoración!
Careces de todo merito por el simple error de quererme
-“Sabes que te adoro por sobre todas las cosas” -Me dices, y mis ojos se derraman en un llanto incontrolable.
Sonríes y atraes mi cuerpo junto al tuyo interpretando para mis lágrimas como si fuesen de alegría; las mismas que sobre tu pecho se vuelven un rio.
¿Cómo podría decirte que no es la alegría lo que produce mi llanto? Que es el dolor, el asco, de saberme tan profundamente querida. Y yo hielo, yo muerte, yo vacío por dentro; yo desprecio, yo odio, yo todo menos amor.
Tu cariño araña mi carne y lacera las llagas que hay en mi interior. Yo soy bálsamo en tu vida, vos sos veneno repugnante en mis labios.
No te quiero, no…definitivamente no te quiero. Definitivamente me odio por odiarte, odiarte por el simple hecho de amarme tanto.
Solo no me preguntes lo que siento…

miércoles, 14 de septiembre de 2011

Exploración

Me voy a cobijar en tu cabello.
Mutarme en ti, conocerte es lo que quiero.
Descender hasta tus pequeñas orejas;
jugarte, para después aventurarme hasta tus cejas.
Danzar por la curvatura de tus pestañas,
para después deslizarme en tus mejillas,
con la vil osadía de las lágrimas.
Llegar a la punta de tu nariz
y admirar el paisaje que desde allí se extiende;
como lo vieses tú, quiero entender como tú entiendes.
Y desde allí un salto hasta tus labios,
reposar allí en la suavidad y calor de ellos;
sentirlos mejor, vivirlos mejor,
acariciarlos con mi cuerpo como si fuese con besos.
Quedarme es decir, a vivir en tu rostro,
Deleitarme, en cuerpo y alma, en lo que llevo grabado en los ojos.

lunes, 5 de septiembre de 2011

Contradicción

Arriba…
Y presiento que te amo,
Que lo seguiré haciendo hasta que resuene el eco del final de los días.
Abajo…
Y presiento que te olvido,
Que las añoranzas de ti se marchan danzando sin una despedida.
Arriba… 
Y recuerdo que te extraño,
Que mi piel se revuelve entre las sabanas exigiendo a gritos tus caricias.
Abajo….
Y recuerdo que te he llorado,
Que loca de odio he gritado en silencio y entre lágrimas mis desdichas.
Arriba…
Y prometo que he de recuperarte,
Que no valdrán mil obstáculos que me impidan atraer de nuevo mi alegría
Abajo…
Y prometo que habré de alejarme,
Que ni un paso hacia ti darán mis pies, que nada tiene por brindarme tu compañía
Arriba…
Y descubro que me falta voluntad,
Que tan solo el roce de tus labios me pierde en un éxtasis de desenfreno.
Abajo…
Y descubro que me falta valentía,
Que tu sola presencia me estremece de un miedo incontrolable y extremo.
Arriba…
Y decido no olvidarte,
Que tu recuerdo seguirá existiendo y que hasta que pueda te seguiré queriendo.
Abajo…
Y decido atrás dejarte,
Que de nostalgia y melancolía, que con tristezas y desdichas no se puede seguir viviendo.
Arriba y abajo…
Y aquí se acaba el juego,
Que yo lo que quiero es estar o del todo bien o del todo jodida. Pero así ya no hay cuerpo que resista...

Rutina

Hoy tengo tu olor impregnado, no sé si en mi piel, no sé si en mi ropa, no sé si en mis delirios…Pero hoy realmente lo siento y esto ha alterado completamente la rutina de mi existir. 
La presencia de tu aroma se me hace anormal dentro de la costumbre de imaginarle cada día; y hoy por alguna incomprensible razón le tengo aquí para recordarme con mayor fuerza la realidad absoluta: que tú no estás y que sentirte rompe mi rutina de tener que imaginarte diariamente. 

martes, 30 de agosto de 2011

Solo ahora.


Entrégate al hoy, no temas del mañana,
Vive el ahora no te aferres al pasado.
Que si al acercarte no te estremeces
Años de historia no pesan nada.
Costumbres amor, solo costumbres,
Que horadan el alma y enfrían la piel.
Y el fuego que arde en cada amanecer
Mañana será solo ceniza;
Polvo corazón que ensucia lo bello
Que cubre de abandono y envejece lo querido.
¿Qué puedo darte más allá de mi presente?
Más allá de la magia que se desprende,
No quiero nada más, no deseo algo diferente,
Adoración viva, cariño sentido íntegramente.
Víveme ahora amor, que mañana no se sabe,
Y si quieres una seguridad solo una puedo darte:
A pesar de mí, por este único instante
(En que tus ojos se clavan en mis pupilas anhelantes)
Te quiero mucho más que nada o nadie.

martes, 23 de agosto de 2011

De mentiras varias

¿Cómo hacer para ser tú y no llorar por mí?
¿Cómo hacer para ser yo y aprender a llorarte al fin?
¿Cómo hacer querido? ¿Cómo pensar, como sentir?
De  nuevo…
Tiene uno que ser muy vos para enamorarte así,
Tiene uno que ser muy yo para no enamorarse de ti.
(O mejor dicho, para poderlo tan bien fingir)

martes, 9 de agosto de 2011

Coral


La coraza en tu interior ha conocido el miedo.
No el miedo de la indiferencia mujer serpiente,
Eres inmune al veneno de desprecio que corre en tus venas.
No sientes pánico de la soledad, tu fiel amiga, pérfida.
El azabache de tus ojos no se amilana ante el enemigo más mortal,
Te regocijas en el dolor frío antesala de la muerte, la ajena, cruenta victimaria.
¡Ah, pero como tiemblas ahora diosa licántropa!
Despliegas tus armas en inútil agonía, en torpe lucha, acorralada.
Tu orgullo rancio te impide partir en franca huida, y te quedas en vana guerra.
No te quedes en posición de lid mujer, que no hay batalla por luchar,
Repliega tus armas que tus murallas están cuarteadas.
Mueres ahora de miedo ante aquel que mansamente pretende tus encantos,
Porque no conoces terror mayor que un ardoroso amor correspondido.

Y hablando de pesares...


Mil demonios se posan en la boca de mi estomago, destilan odio. Cargados de pestilencia encuentran asidero allí donde no alcanza la luz, donde todo lo bueno se convierte en un vaho pútrido que va carcomiéndome las entrañas.
No, no lo pueden ver. Cobarde como es, el infeliz se camufla bajo sonrisas simuladas. Porque millares de pesares se conjuran en un solo ser que repta sin traba por un cuerpo inerme que ha despreciado su redención.
Prisión de carne, vil instrumento, tan solo una masa que sirve como alimento de plagas. Y todo en apariencia tan perfecto, tanta paz en un rostro anémico es sinónimo irrefutable de agonía, y aun así no lo ven…no lo pueden ver.
Arcadas agónicas irrumpen el silencio de la noche, exorcismo incompleto, expulsión falsa. Un alivio que no es tal; como el drogadicto, como el abstinente, un placebo fisiológico en busca de un bálsamo que pasa desgarrando mi garganta con estruendos de dolor.
Consuelo artificial. Sonidos guturales que erizan la piel de nadie, sin testigos, sin que haya un espíritu altruista que se atreva a inmiscuirse, causa perdida lo saben, guerra perdida se entiende…maldición perpetua.
Las pupilas se anegan en lágrimas de frustración mientras el cuerpo en un último esfuerzo va buscando el final del tortuoso ritual. En busca del vacío, se desata un torrente maligno que fluye arrastrando consigo el néctar mismo de la vida…la vida se me va yendo a coutas por el drenaje.  
Y todo se va, todo se pierde y se diluye en agua. Todo, menos el mal nauseabundo que con garras y ganchos está anclado en mí ser. No hay vomito alguno que pueda expulsarle de allí…
Una oda a vos maldición miserable que vas consumiendo mi salud.

lunes, 8 de agosto de 2011

Plegaria



Silencia mis labios señor, calma el ímpetu de mis dedos, de mis ojos. No me dejes caer, no me permitas recaer. Conserva el mutismo en mi existir, que las razones las conoces todas.


Que mi verdad la conoce el cielo, la conoce la luna, el techo de mi cuarto, la soledad de mis sabanas, la madrugada, mis demonios. La sabe todos menos a quien corresponde saberla ¡Acalla mis sonrisas a sus ojos!

Destroza el ruido que corre en mi ser. Quítame las ganas de gritarle al viento su nombre, de llorar a sus pies, de proferir a viva voz todo esto que me carcome tan adentro.

No dejes desbordar el rio de sentir que llevo estancado conmigo, hazlo por mí, hazlo por él. Que prefiero morir ahogada antes que dejar que mi maldición anegue su vida.

Tú sabes con cuanto amor he callado, no dejes que ahora mi debilidad destruya esas compuertas que construí para él, por culpa de él, para resguardarme de él.

¡Ayúdame por favor que siento que ya no puedo sola! Que una sola mirada suya, una sola sonrisa, podría destrozar todo cuanto hay en mí. Protégeme de él, protégelo de mí y de lo que siento. Que tanto silencio no va en vano y me moriría antes de dañarle.

viernes, 22 de julio de 2011

Terapia de besos

Un delirio irreal con nombre propio,
Que tiene como única cura unos besos ajenos.
¡Cuánto no daría por tener esa medicina secreta en mi ser!
Pero solo tus labios, único y mortales,
Me entregan el elixir que calma la sed que sufro.

Eres opio de lujuria, toxina que invade y sana;
Veneno que bebo a conciencia, lucida,
Para calmar mi propia locura e insensatez.
Con seguridad suicida me bebo la droga en tu saliva.

Drogadicta de ti, la abstinencia carcome mis labios,
Mis dientes ansiosos laceran con angustia mi propia boca,
A falta de la tuya, a falta de ti.
El síndrome que sufro tiene tu imperfección marcada por doquier.

No conozco, no encuentro, no me interesa,
No quiero otra manera de sanar mi locura.
Si no es con besos, si no es con TUS besos,
Prefiero seguir enferma de nostalgia
¿Qué interés puede tener mi cariño narcótico en otro tipo de calmante?

Galeno  de mis desvelos, necesito tu terapia,
Así que…¡Cúrame o mátame!
Que lo mío es cuestión de algo más que una simple manía.

martes, 19 de julio de 2011

De batallas perdidas.

-¿Quién le autorizó la entrada?
-Vamos a darle una oportunidad
-¿Una oportunidad? ¿De qué? ¿A razón de que? ¿Quién es este tipo?
-Dicen desde los recuerdos que es alguien importante.
-¿Importante? Eso no dice nada, importante es cualquiera
-¡No es un cualquiera!
-Se porta como tal…
-Es tal. Pero, lastimosamente, no lo es aquí
-¡Alguien tiene que responder por esto! ¿Qué pasó con las defensas?
-Se derrumbaron
-¿Las derrumbó todas?
-No. Cedieron; las eliminamos
-¿Estamos sin defensa alguna?
-Prácticamente
-¿Quién las mando a destruir?
-(Silencio)
-¿Qué barreras nos quedan?
-Pocas…A estas alturas un poco de sensatez, la desconfianza está en pie pero débil y miedo, hay mucho…
-¿Solo eso nos queda? ¿Qué pasó con la voluntad, con la prevención? ¿Qué pasó con la frialdad?
-La voluntad es suya pero el frente de sensatez se empeña en mantener eso como secreto de estado. La prevención se cayó por su propio peso y donde había frialdad hay una invasión de afecto y ternura.
-¿En qué momento pasó todo esto? ¿Acaso lo conoces?
-Muy bien. Es caprichoso, indeciso, simple, voluble, no sabe lo que quiere…
-Eso significa que tampoco sabemos si le quiere.
-No…
-¿Y alguien le quiere a él?
-Dice el corazón que él le quiere mucho.
-¿El corazón? ¿Acaso aprendió a hablar?
-No, aun no logramos descifrar su lenguaje pero parece que aprendió a decir eso en el nuestro y lo repite como un loco todo el día.
-¡Convoquen una junta! Esto es grave. ¿Alguien sabe que opina el cuerpo?
-Nos llegan informes que dicen que el cuerpo ya no puede soportar las emociones que está experimentando.
-¿Quién dejó libres las emociones?
-Escaparon en cuanto se derrumbó la voluntad
-¿Es muy fuerte el ataque?
-Mucho. Dice el cuerpo que la piel se eriza en cuanto le toca, que el olfato se ha vuelto terriblemente sensible a su olor, que las manos le buscan, que las piernas por una extraña razón terminan siempre entre las suyas, que los ojos no pierden minuto para deleitarse con sus labios y su mirar, que una sonrisa incontrolable se apodera de la boca en cuanto le oye o le ve.
-¿Se ha dado cuenta acaso de todo eso?
-El cuerpo ha luchado todo lo posible por fingir pero hay cosas que se le escapan. Es demasiado obvio…
-¿No ha usado la indiferencia?
-Toda. No ha funcionado, ya no queda más, se nos ha agotado.
-¿Qué pide el cuerpo entonces? ¿Mandamos refuerzos?
-…Dice que no quiere aguantar más...
-¿Piensa rendirse?
-Ya se ha rendido. Pide autorización para dejarse llevar.
-Denegada. Ha sido de nuestros mejores guerreros ¿Qué le ha pasado?
-Le desea con fuerza. Pide excusas al mando central por su error pero dice que le fue inevitable.
-¡Esto es un desastre! ¿Qué ha hecho el sujeto este para causar un caos así?
-Pues básicamente no mucho…
-¿Entonces? ¿Por qué nada ha funcionado en su contra? ¿Qué puede tener de especial?
-De los recuerdos han mandado un informe detallado sobre ese punto pero no es muy claro. Pensé que se habían equivocado de documento pero me han rectificado que efectivamente eso es lo que contiene la base de datos; solo hay un gran número de defectos y muchas tonterías.
-¿Qué ha hecho entonces de diferente?
-Técnicamente nada. Ha usado lo mismo que todos pero al parecer algo ha hecho que cada cosa que hace se sienta diferente.
-Comunícame de inmediato con el alma. Esto requiere medidas extremas
-Ya está enterada y se ha comunicado con nosotros.
-¿Ya? ¿Y que ha dicho?
-Le quiere…con toda el alma
-(Silencio)…Desplieguen las tropas, traten de subsanar los daños causados, pongan en vigilancia al corazón y usen los escudos para proteger lo poco que queda. Perdimos en nuestra ley…
-A lo mejor no es tan malo perder en esta ocasión.
-(Suspiro) Yo solo sé…que esto va a doler mucho…

jueves, 7 de julio de 2011

Ajena

¿Cómo le digo señor que, sin quererlo, le quiero por encima de todo?


Que tengo las manos sangrantes de espera,
Los labios flagelados por besos ajenos,
Que el frío de mi cuerpo me quema. 


Que cada que me cubro con caricias extrañas
Solo logro que mi cabeza se remuerda al saberme suya.
Tan completamente suya, tan absurdamente de él,
Tan inevitablemente poseída por su no-presencia.


¿Cómo decirle señor que profano su recuerdo buscándolo en otros?
Y que solo logro hallar un remordimiento aplastante.
Que me ahogo en besos, caricias y sonrisas,
que añoro suyas pero que no le pertenecen.


¡Que me lleve por dios! Que me reclame suya,
O que me entregue completamente mía. 
Ya no soporto saberme ajena en mi propio cuerpo...

jueves, 30 de junio de 2011

Mi presidio

"Te vi partir, y el amor en mi silencio se hizo llanto,
vi juguetear sobre tu espalda haciendo olas tus cabellos,
fija mirada en la distancia yo iba siguiendo tus pasos,
vi diluir en tus pupilas empañadas mi embeleso.

Pensé vivir donde jamás lograra palpar tu presencia
he visto el cielo del olvido y me di cuenta
que estoy perdido en el camino de mis sueños.

Mujer tu eres mi presidio mi corazón es cobarde,
en ti quiero refugiarme, aunque existen mil motivos
que ha sido imposible darme amor tesoro escondido

Como felino en asechanza yo iba siguiendo tus pasos,
me siento esclavo de la noble y sublime intención de tenerte,
y no te enojes si por sincero un día te pido lo deseado,
quiero que sepas solo al mirarte la ansiedad al mirarte loco me vuelve.

Y tu haz notado que no es antojo simplemente el que me asiste
es un amor que he combatido pero insiste
y me seduce para que te siga amando.

Tu escrutadora mirada, tu voz callada me avisa
que me quieres con el alma, lo confirma tu sonrisa
y que tal vez sea mañana que acudirás a mi cita."

¡Ay que bonito me suena ese canto vallenato lleno de sentimiento!

viernes, 3 de junio de 2011

Sacrilegio

Profanación es hacer publico aquello que por su valía debía siempre permanecer escondido del mundo común.
Profanación es entregar tu verdad para no perderle entre los recovecos del recuerdo y del pasado.
Profanación es aferrarse a la única manera de hacer realidad aquello que tomó forma entre la oscuridad y la fantasía.
Profanación es sonsacar, violar, manchar, deshonrar, degradar, insultar, matar, olvidar....


Todo un sacrilegio lo que hice con esta historia...
Lo que hice conmigo, lo que hice contigo, lo que hice con ese "nosotros"...
"Suena como un crimen lo que tu me has hecho"

jueves, 2 de junio de 2011

Divina tentación.

"Así me nombraste en nuestra última conversación, conversación en la que una vez más dejaste afuera la verdad, todo se pudo evitar de habernos retirado a tiempo, ambos culpables, lo sabes, no me dejabas ir y yo quería quedarme... pero a pesar de todo, de tus ofensas y las mías, del sin fin de mentiras que me regalaste, de las amenazas, las lágrimas y las ganas de no volver a verte, tengo tanto miedo, tanto, de que el día menos pensado tú pierdas la vergüenza y yo el orgullo y volvamos a caer enredados en ella... Divina tentación.

No podemos alejarnos así queramos -también dijiste-
Quisiera no creerte..."

domingo, 29 de mayo de 2011

Desesperación.


Este antojo urgente y voraz que llena mi ser esta noche

Quiero arrancarte la piel a mordiscos!
Hambre de ti,
Necesidad voraz.
Me quiero beber tus labios,
Besar tu dolor,
Saborear tus heridas
(y si no las hay,
Herirte yo)
Comerte,
Degustarme en ti.
Lamer TU cicatriz,
esa diferente
en tu existencia de cualquiera.
Sed de ti,
Ansia de tus fluidos.
Todo, entero,
Te deseo.
No, ¡Te necesito!
Pasión por ti,
Apetito desmedido.
Anhelo voraz,
Deseo insaciable,
Abstinencia absurda.
Ganas…
Cuantas ganas.
Desenfreno, calor,
Ardor violento,
¡Quema, como quema!
Al deseo atada,
De mi lujuria esclava.
Ayuno inútil,
Carencia total,
Que me faltas ¡Carajo!
Paciencia, resignación,
Desesperación…
Definitivamente
Hoy me conformo solo con lamer tu cicatriz.

viernes, 13 de mayo de 2011

Para no olvidar...

Escribo para no olvidar.
Todo con la esperanza fútil de perpetuar todo aquello que acudo a plasmar en letras ávidas de vencer a este tsunami de olvido que va cruzando por mi existencia.
Porque el olvido me llega (tarde como siempre, como todo en mi vida) pero cargado de un ímpetu feroz que va barriendo con todo aquello que se encuentra a su paso. Y si de repente voy olvidando lo que fui me produce terror la idea de olvidar lo que soy (aunque no logro recordar cómo es que llegue a ser); y peor aún, a olvidar lo que tuve muy a pesar de la extraña sensación que me ronda de nunca haber tenido.
En este mar de olvido todo se confunde y se va yendo en medio de un silencio que se hace cómplice. Lo que no se asegura no permanece y por ello me aferro con las fuerzas que me quedan a tus recuerdos; por lo menos mientras no deje de recordar que por este instante y por los siguientes no estoy dispuesta a desistir de ti. Aunque a estas alturas ya haya olvidado completamente las razones que me instan a seguir empeñada- como si me fuera la vida en ello-en no dejar marchar el leve vestigio tuyo que me queda. Aunque todo este maremoto de olvido haya sido creado únicamente por la imperiosa necesidad de borrarte a ti, tan arraigado de mi ser.
No importa, no interesa, eso último sé muy bien que pronto también lo olvidaré…  

lunes, 9 de mayo de 2011

Cicatrices


Tengo una cicatriz en el alma, otra grabada en las pupilas y otra velada en el recuerdo. Todas nacientes de la misma herida con nombre y vida propia, todas producto del mismo delirio obsesivo


sábado, 7 de mayo de 2011

Profanación


Tus labios sobre los míos ¿Qué has hecho? Una ola de calor me invade mientras una lágrima corre por mi mejilla, mientras en mi pecho mi corazón late con tal fuerza que siento que saldrá, mientras mi oídos zumban y siento como el control me abandona. Acabas de destruir todas mis defensas.

Un leve gemido se escapa de mi boca, no se si de dolor al recordar tus palabras, tu rabia, tu decepción, no se si de placer al sentir por fin tus labios; acercas tus manos a mi cuello y oprimes mis labios contra los tuyos, buscando completar por fin ese beso tan anhelado, ese beso que has buscado durante tanto tiempo, ese beso que yo me empeñaba en negarte cuando moría de ganas por dártelo. Mis labios se separan buscando el calor de tu boca, y me estremezco toda al sentirlo. Y ahí está tu lengua, tu boca desprendiendo un calor que me embriaga; te beso con cadencia, mientras mi cuerpo se va pegando al tuyo, buscando fundirme en el. Quiero sentirte con cada parte de mi ser, cada uno de mis poros necesita estar cerca de ti, tocarte…Mi cuerpo se rebela contra lo que dice mi cabeza, ya no pienso, ya no razono, solamente quiero sentirte. Las lágrimas siguen cayendo por mis mejillas mientras lentamente nos fundimos en un abrazo; tu mano baja desde mi cuello hasta mi espalda, acariciándola, que sensación tan deliciosa tus manos tocándome a su antojo. Siento que se me va el aliento a cada segundo, esa mezcla de ternura, de deseo, de pasión, con la que me besas me está enloqueciendo; muerdo tus labios mientras mis brazos se aferran a tu cuello y enredo mis dedos entre tu cabello. “Te quiero, te quiero, te quiero…” es lo único que se repite en mi mente.

Sin dejar de besarme me llevas hasta tu cama, siento como recargas suavemente el peso de tu cuerpo sobre el mío y me estremezco al sentirte. Dejas de besarme y te quedas viéndome fijamente, y yo ahí, completamente rendida ante ti, respirando agitadamente, con las mejillas llenas de lagrimas, aun con los labios entreabiertos a la espera de tu siguiente beso; me siento tan vulnerable, me siento totalmente desarmada ante ti y poco me importa ya. Lentamente retiras con tus dedos las lagrimas que aun sobreviven sobre mis mejillas, y comienzas a acariciar cada centímetro de mi rostro con tal deleite que siento el rubor en mis mejillas, rozas con tus dedos mis pómulos mis cejas, mis ojos, mis pestañas, el contorno de mi rostro, como si quisieras grabar con tu tacto cada recodo de mí; no sabes lo mucho que disfruto tus caricias, mis ojos se cierran al sentir tu tacto buscando grabar en mi mente cada sensación. Llegas a mis labios, los dibujas con tus dedos y dejas en ellos un suave beso que hace que me levante casi por inercia en busca de tu boca, pero me haces sufrir y alejas tus labios de los míos. Una leve venganza por tanto tiempo de sufrimiento.

Pero detienes mi sufrimiento comenzando a besar mi cuello, lentamente, con tal devoción que haces que mi ser se estremezca; muerdes el lóbulo de mi oreja y siento tu respiración en mi oído, no puedo evitar suspirar al sentirte. Tus manos van recorriendo mi cuerpo lentamente, dibujan el contorno de mi silueta desde mi cintura hasta mis muslos en un movimiento de vaivén constante y me gusta, me encanta sentir tus manos y no entiendo como pude soportar tanto tiempo sin ti. Bajas por mi cuello besando suavemente hasta llegar a mi pecho, dejas un beso coqueto justo en el escote y te levantas un poco a mirarme fijamente. Te observo mirándome, tus ojos están aun un poco enrojecidos por las lagrimas que has derramado por mi culpa, tu cabello revuelto, me miras con tal profundidad que siento que tu mirada me desnuda el alma, tus manos siguen acariciando lentamente mi cuerpo y tu expresión es de incertidumbre ¿Tienes miedo? Yo también, mucho; no sé qué va a pasar con nosotros, pero ya no quiero seguir un segundo mas sin sentirte, no quiero pensar, ahora no, no en este momento…mis manos se van hacia tus mejillas y te acaricio, te atraigo hacia mí, necesito tus labios sobre los míos, el aire no se me hace si no viene impregnado de tu aliento. Me besas con arrebato mientras me aprietas contra tu cuerpo, y yo me dejo, me entrego a tus brazos para que hagan de mi cuanto quieran; tus manos se cuelan entre mi ropa y ahora tocan directamente mi piel, a cada caricia aumenta el calor en mi y se despierta la imperiosa necesidad de sentir el roce de tu piel contra la mía ¿Quién habrá sido el malvado que ha puesto esta barrera de tela entre los dos? Mis manos se aferran a tu camisa y temerosa de ir más allá casi sueño con la posibilidad de desvanecerla con ese simple gesto. Dejas de besarme e involuntariamente me quejo de la orfandad de mis labios, te diriges hacia mis pechos y después de besarles dulcemente te acomodas con ternura sobre ellos, debes escuchar el latir desbocado de mi corazón mientras tus manos siguen acariciando directamente mi cintura.

Tiemblo de ansiedad ¿Es todo? No te quedes así, no quiero que termines, no quiero enfrentarme tan rápido al después, no quiero saber que habrá de ser de nosotros, quiero alargar este momento todo lo que pueda, una eternidad si es posible. No, no le des chance de aparecer a mis inseguridades, atúrdeles con besos, con caricias, niégales con tu cuerpo la entrada a este momento tan nuestro. No dejes que me haga consciente del error que cometo al extasiarme con tu ser ¿Ves? Ya hablo de errores, en el instante más hermoso yo solo pienso en errores…Las lágrimas se agolpan en mis ojos y lucho con ferocidad contra mi capacidad de resistir ¡No quiero resistirme, quiero dejarme llevar por ti! Pongo mis manos alrededor de tu cabeza y te obligo a incorporarte un poco, me miras confundido mientras me incorporo también un poco para besarte, con mis ojos te suplico que no te detengas. Me das un beso de vuelta y acaricias una de mis manos sobre tu rostro, cuelas la tuya por entre los dos y vas dibujando un camino desde mi cuello, pasando por la mitad de mis pechos hasta meterla por dentro de mi blusa, te detienes y me miras inquisitivo, me pides permiso. No profanas mi mundo, mi cuerpo, dejas que sea yo misma quien te lo entregue; bajo la vista dubitativa, el miedo me paraliza unos instantes, suspiras con resignación como leyendo mi inseguridad y comienzas a retirar tu mano, te detengo y como respuesta tomo tu mano y le guio más adentro.

Ahora me besas con pasión y mi blusa yace sobre algún punto de tu cuarto, tus manos coquetean las inmediaciones de mi sostén mientras yo me concentro en la mejor forma de deshacerme de tu camisa. Sueltas el broche con decisión y mis pechos quedan libres, te separas de mí y satisfecha compruebo como te deshaces rápidamente de ese par de molestas prendas para reanudar ese beso necesario. Me abrazas con fuerza y yo me aferro a ti como si me fuera la vida en ello, siento la sensación de mis pechos desnudos contra tu piel y suspiro encantada. No puede igualarse con nada la sensación reconfortarte del calor de tu piel directamente junto a la mía


miércoles, 4 de mayo de 2011

Voces

"Quiero perderme en la inconsciencia de olvidar quien soy...
Camuflarme en mil formas para jugar a la guerra con tus sentimientos; respirar profundo el aire del engaño que muestras a los demás y así, simplemente, continuar creyendo tantas dulces mentiras que salen de tu boca como las serpientes salen de la tierra…

Tal vez muestre a los demás aquella mentira que despoja mi alma de dolor y desasosiego, pero es por no tenerte a mi lado, por ser solo tu quien ha develado esa verdad encarnada en mi corazón. ¿Y todo para qué? Si se vuelve cada vez más falsa ante ti. Si ya no encuentro otro camino que mentir con dulces palabras a tus oídos, repetirlas una y otra vez…

Pero así conduces mi ser al olvido de la razón, a lugares con tonalidades grises y negras que me alejan cada vez más de ti. ¿Acaso mi ser no merece ver más allá de las luces que oscurecen nuestras vistas? Añoro poder besar tu alma, y no el frio retrato que enmarca lo que alguna vez fuimos: algo puro y eterno...

Tu ser podría merecer el resplandor de nuestros sentimientos, pero ya se han alejado tanto que la luz ha quedado en un abismo, tan profundo que podría caer allí también la ilusión de poder seguir jugando una guerra llena de suspiros de desilusión ...
Si así es, acompaña mi alma a caminar una última senda, a dejar atrás todo lo que fue y ahora no es, déjame besarte en medio de mi delirio final y así entregare gustoso mi alma a la merced de tus deseos...

¿Pero como puedo hacer lo que me pides? ¿Acaso mis ojos no te gritan que quiero seguir junto a ti? Aunque todo sea una mentira, porque este amor se ha transformado en algo más puro y solo desea tu presencia, mucho más que tus labios, mucho más que tu piel...

Piensa amada mía: En las noches el frío consume mi alma al saber que no poseo el calor de la tuya; piensa que camino solitario en medio de paramos extraños, reviviendo en mi mente las horas felices que ahora solo cruzan mi camino como fantasmas del ayer ¿Acaso no soy merecedor de tenerte aquí solo mía…ser solo tuyo?...

Ya nada se puede hacer. Si el frio que te consume es el mismo frio que durante tanto tiempo guarde dentro de mí a la espera de una sola de tus miradas; solo llegaste a mi cuando mis esperanzas se las había llevado el llanto que derramaba cada noche al ver que no estabas para mí...
Esa distancia que te agobió fue la misma que nació de las largas noches en el bar donde ahogaba las penas que tu traición produjo en mí. El verte en brazos de furtivos amantes, miserables marinos de puertos extraños que con dulces palabras llenas de mentiras te alejaban cada vez más y más de mi...

Yo tan solo quería perderme en la inconsciencia de olvidar quien soy...

En la misma inconsciencia que hoy embarga mi alma y la prostituye en la bolsa internacional vendiendo a centavo cada instante de felicidad junto a ti. Ahora que me vende cada minuto de alegría al precio del petróleo, hace que me sumerja a cada minuto más en el delirio de lo que antaño perdí y ahora lloro por recuperar. Dame entonces un último beso y después entrega lo que dejas de mi a los brazos del hades, ya que ahora no quiero otro fin más que el morir...

Son solo palabras vacías y sin sentido las que ahora pronuncias porque no me quieres perder; porque sabes que fuiste tú quien me ha dejado el alma marchita, llena de heridas que el tiempo no ha sanado aun y siguen sangrando con cada caricia. Mi...mi agitada respiración se escucha en todo el lugar  ¡Ya no te lo puedo ocultar más! ¿Acaso no ves como tiemblo al pensar que puedes darte cuenta de la verdad? Lo he ocultado por poco tiempo pero no quiero morir junto a ti....
Aunque sea por un último instante deja que mi alma te muestre lo que hay de mi para ti; deja que demuestre con hechos, no con palabras, la verdad que hay en mí. Porque tan culpable tu como yo; tan culpables ambos de que hoy nuestras palabras tengan sabor a dolor, a tristeza fría y marchita. Por amarnos y no besar nuestras almas solo para mostrar que ambos somos fuertes...

Bajemos los escudos que nos separan y seamos que el debió ser desde el comienzo: uno feliz de ser uno, y no dos infelices de ser dos..."

Escrito realizado por: Sergio y Natalia Barajas García. Con la intromisión y edición de: Alina

martes, 3 de mayo de 2011

Historia de un querer

.
Había una vez una niña que sin querer te quería mucho. 
Y que por falta de querer un buen día quiso no quererte más.
...Cuan difícil se hace diferenciar entre una historia corta con final anticipado y un comienzo sin final...

¿Regresas?

I
"Te fuiste después de dos cervezas,
extendiendo disculpas apócrifas.
No te creí
pero me quedé mirando
el fondo de mi copa,
tejiendo un chiste para atorar el llanto
que se me venía por el sexo
y las piernas recién depiladas."

II
"Volviste de tus excusas a saludarme
una tarde.
Me quitaste toda la sangre del cuerpo
y te fuiste prometiendo un nos vemos
Yo sólo pude toser
para atragantar ese llanto
que se me viene por entre las piernas
cuando te vas."